¡Cuatro es un número perfecto!

Rachel Byrne no esperaba volver a empezar. Pero entre la maternidad, un nuevo empleo y las cicatrices de un divorcio reciente, intenta seguir adelante — hasta cruzarse en el camino de Ethan Wisbech, un CEO reservado y también padre soltero.

Lo que comienza como una relación profesional marcada por la distancia y el respeto se transforma en algo más delicado.

Entre silencios compartidos y encuentros discretos, nace una conexión inesperada.

Con ligereza, emoción y humor,“Nunca los buenos tiempos parecieron tan buenos…” abre la serie: ¡Cuatro es un número perfecto!, una historia sobre decisiones difíciles, afectos contenidos y el poder de los gestos simples — cuando dos corazones deciden acercarse, incluso en secreto.